Escucha, hermano

Esta frase sentencia algo como una verdad indiscutible pero, sin embargo, no lo es. Comprendemos que hay gente que puede sentirse molesta cuando alguien se inventa las cosas, algo muy común en nuestra especie (Homo sapiens sapiens con linaje neanderthalensis) pero no es el sentido de la vista (ojos) el único instrumento para descubrir la realidad. Además, esta frase  condena a los ciegos como unos mentirosos. También se olvida del oído, del tacto, del olfato y del gusto, que son fuentes distintas pero tan importantes como la vista y con las que es posible no inventarte lo que cuentas aunque no lo hayas visto. La frase que hoy analizamos es el tópico manido de "una imagen vale más que mil palabras", aunque reinventada al más puro estilo Facebook, con un toque de rencor aleccionante, alienante y justiciero.
Pero aveces las palabras son más importantes que cualquier imagen. Si no fuese así, no tendría sentido por ejemplo, leer libros. Sería mejor (según el tópico) hacer mudas representaciones teatrales de por ejemplo la obra de Shakespeare, tomar unas instantáneas y después hacer unos álbumes de fotos. Así no habría necesidad de leer su obra y como una imagen vale más que mil palabras, las bibliotecas deberían ser fototecas. Por último recordamos que los ojos (el sentido de la vista) también pueden engañarte y la mayoría de las veces son responsables de muchos de los prejuicios y discriminaciones diarias que suceden a nuestro alrededor.